Noticia09/03/2020

GESTO CUARESMA 2020

Gesto de Cuaresma: “Ayuna, Comparte y Ora”

 

            Desde 1999 la celebración de la Cuaresma viene acompañada en nuestra diócesis de Santander por la Campaña del Gesto de Cuaresma: “Ayuna, Comparte y Ora”, promovida por Cáritas Diocesana. Es una realidad muy acorde con el tiempo cuaresmal que hemos de potenciar con todo nuestro empeño.

 

            Ayunemos, no por pura mortificación o por guardar la línea, sino para ser más libres venciendo la gula y las leyes del consumismo. Ayunemos para amar más a los que padecen hambre todos los días del año y como expresión de nuestra vida austera.

 

“Partamos nuestro pan con el hambriento”. El milagro de la multiplicación de los panes y los peces no sólo ha ocurrido una vez en la historia. Ocurre con mucha frecuencia. Jesús nos dice: cada vez que lo poco que tenéis, lo compartáis con los demás y contéis con mi bendición, yo me encargaré de que haya para todos y sobre. El Reino de Dios es abundancia y no escasez. El que vive insolidariamente va cerrando las puertas y ventanas de su corazón y acaba hundiéndose en la oscuridad y en la soledad. La caridad -auténtica verdad de nuestra vida- es fruto del Espíritu Santo. Es su fuerza la que nos empuja al amor solidario.

 

            Acompañemos el ayuno y el compartir con la oración. Para que el orgullo no se apodere de nosotros creyendo que dominamos a la perfección nuestro cuerpo. Para que el compartir no se quede en algo puramente humano. Oremos en Cuaresma reconociendo nuestro pecado y, sobre todo, oremos para que podamos celebrar la Pascua un año rebosantes de gozo.

 

El Gesto de Cuaresma: “Ayuna Comparte y Ora” cada año financia proyectos destinados a pueblos y personas pobres y necesitados, especialmente en el Tercer Mundo. En este momento necesita un empujón porque, con el paso del tiempo, corre peligro de decaer y es una iniciativa bien hermosa que vale la pena potenciar. Motivad, pues, el gesto penitencial del ayuno enfocado a poner de manifiesto que “no sólo de pan vive el hombre, sino de toda Palabra salida de la boca de Dios” y que ha de desembocar en el necesario compartir los bienes, tan característico de los cristianos.

 

Un saludo afectuoso con mi bendición

 

 

+ Manuel Sánchez Monge,

                                                                Obispo de Santander

                                                                         5.02.2020