22/04/2019

¿ Por qué no vivir desde ahora como Resucitados?

Jesús de Santos, Delegado Episcopal Cáritas Diocesana de Getafe

Quisiera compartir con todos vosotros, con gran alegría, lo que tratamos de vivir desde nuestra fe.:  JESÚS VIVE ENTRE NOSOTROS,  o mejor como nos ha recordado el Papa    “¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive?” y a la cual responde firmemente: “El Señor no vive en la resignación. Ha resucitado, no está allí; no lo busquéis donde nunca lo encontraréis: no es Dios de muertos, sino de vivos” y exclama: “¡No enterréis la esperanza!”.

Es decir, nuestro Dios es un Dios de la Vida, que nos pide ser testigos de su Resurrección, poniendo y ofreciendo hechos de vida en esos lugares donde reina la muerte. Y es lo que tenemos que tratar de vivir cada día y en especial esta Pascua. Los cristianos no somos personas del Viernes Santo y del sufrimiento, sino del Domingo de Resurrección y de la alegría y el compartir.

Sabemos que la Resurrección de Jesús, que garantiza nuestra propia resurrección, no es un hecho que podamos demostrar científicamente. Son muchas las ideologías y filosofías que predican la nada después de la muerte; pero, para nosotros los que creemos en el Resucitado, es la razón fundamental de nuestra existencia.

 Me atrevo a decir que, si Jesús no hubiese resucitado, no existiría la Iglesia; pues lo que transforma a los apóstoles, a estos primeros testigos haciéndoles vivir de una forma nueva, como una familia que comparte sus bienes y su vida, es encontrarse con Jesús, pero resucitado, no  con el crucificado. A la hora de la cruz todos le abandonan, hasta Pedro dice: “yo no conozco a ese hombre” Para ellos decir “Cristo ha resucitado” era algo tan normal como lo es para nosotros el decir “buenos días”. Era la experiencia propia de la Comunidad cristiana primitiva.

Ello nos compromete a vivir, desde ahora, como resucitados; lo esencial no es resucitar dentro de diez o 20 años sino vivir desde ahora como personas nuevas, que viven la experiencia de un Dios que ha resucitado a su Hijo y nos ofrece el participar de su misma vida, siendo testigos de un Dios que quiere una vida digna para todos sus hijos y nos pide que pongamos Vida donde otros ponen muerte; nos pide el participar del Proyecto de hombre nuevo que Dios tiene para la humanidad, haciendo opción por sus preferidos, los últimos y excluidos.

Además esta vivencia del Resucitado nos permite encontrar sentido a muchas realidades y situaciones  de dolor y cruz que tiene la vida  y a entender que la última palabra no la tiene la muerte, sino la vida; es decir  Dios, que nos pide ser sembradores Pascuales, testigos de su Resurrección en todos los lugares y personas que forman parte de nuestra historia.

 

FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN

Jesús de Santos