“Un cristiano que no sabe dar gracias ha olvidado el lenguaje de Dios»
Es así como, desde Cáritas Diocesana de Cuenca, queremos comenzar este nuevo año: dando las gracias a la sociedad en su conjunto.
Gracias a las personas más empobrecidas que, en sus momentos de mayor
dificultad, confiaron en nosotros.
Gracias a las personas, socios, donantes o empresas que han confiado en
nosotros y en nuestro trabajo.
Gracias a las Administraciones Públicas que han puesto su acento en colaborar con distintos programas que desarrollamos.
Gracias a los Medios de Comunicación que han sido una herramienta de denuncia social. Visibilizar nuestro trabajo ha sido más fácil gracias a vuestra labor.
Gracias a la Diócesis de Cuenca en su conjunto, por cuidar y atender cada
rincón de esta Provincia.
Pero, sobre todo, queremos dar las gracias a nuestros voluntarios, que de
forma desinteresada han prestado lo más valioso del ser humano que es el
tiempo. Todos ellos han tenido un objetivo común: mejorar la situación de las
personas más desfavorecidas.
A todos, gracias.