El Fondo de Emergencia “El Granero de José” lleva más 47.000 € entregados a personas necesitadas
El 28 de marzo de 2021, los cristianos hemos celebrado el Domingo de Ramos. Por segundo año consecutivo los fieles no hemos podido procesionar por las calles de nuestras ciudades con los ramos a causa de las restricciones causadas por esta terrible pandemia.
El Fondo de Emergencia “El Granero de José” lleva más 47.000 € entregados a personas necesitadas
El 28 de marzo de 2021, los cristianos hemos celebrado el Domingo de Ramos. Por segundo año consecutivo los fieles no hemos podido procesionar por las calles de nuestras ciudades con los ramos a causa de las restricciones causadas por esta terrible pandemia.
Los efectos devastadores que, ya en marzo de 2020, se preveían que la pandemia iba a causar sobre la salud y la economía hicieron que el Arzobispo Castrense de España, D. Juan del Río (q.e.p.d.), fallecido a causa del coronavirus el pasado 28 de febrero, instara a Cáritas Castrense a las creación de un fondo de emergencia denominado “El Granero de José” (puedes tener más información en el siguiente enlace https://www.caritas.es/castrense/campanas/fondo-de-emergencia-el-granero-de-jose-covid-19/ ).
La situación actual del Granero de José constata lo oportuna y necesaria que fue la medida y la necesidad de continuar con ella durante estos meses en los que la pandemia y sus efectos sobre la salud y la economía siguen ejerciendo su nefasta influencia sobre la sociedad.
Los conceptos por los que se aplican estas ayudas y la filosofía de creación del fondo sigue siendo cubrir, de una forma rápida y con las menores trabas burocráticas posibles las necesidades básicas de alimentación, higiene infantil, alquileres de domicilio, suministro y transporte de los más necesitados o desprotegidos.
Desde que se inició la recogida de donativos ya se han recaudado 88.664 euros, gracias a la generosidad de 502 donantes. De ellos han sido repartidos 47.819 euros auxiliando a 297 personas.
Las familias que se ayudan carecen de recursos económicos suficientes para cubrir sus necesidades básicas (comida, alojamiento vestuario, electricidad…) La mayoría de ellas tienen hijos menores a su cargo y los progenitores se encuentran, uno o ambos, en desempleo, situación de ERTE o con trabajo en precario. Se atienden también a familias de ex intérpretes afganos de las tropas españolas que se encuentran en estas situaciones, a antiguos legionarios en situación de exclusión social (situación de calle) y familias de internos en prisión militar en precariedad económica con menores a su cargo. En el mes de febrero se dio el primer caso de apoyo a una familia en el que fue necesario satisfacer necesidades sanitarias para material ortopédico, centro de día y gastos de desplazamientos para intervención quirúrgica.
Como se desprende de la experiencia, es muy previsible que la situación provocada por la pandemia del COVID 19 que padecemos se mantenga en el medio plazo y los casos que se nos presentan sigan manteniéndose e incluso aumentando en número y gravedad.
Necesitamos por ello, continuar sin pausa con la inestimable ayuda de los centenares de donantes que están sensibilizados con esta buena acción. Damos las gracias a todos ellos y a los voluntarios que están soportando el proyecto.