Nuestro día a día07/10/2019

Hoy celebramos el Día Mundial por el trabajo decente

Centramos nuestros esfuerzos en la lucha contra la indecente precariedad que afecta a muchas personas trabajadoras.

Para Cáritas la participación en Iglesia por el Trabajo Decente (ITD) está siendo fundamental desde todos los aspectos posibles y durante estos 5 años de andadura, cada vez más Cáritas diocesanas y parroquiales se han ido uniendo de una forma u otra, ya sea formando parte de las ITD locales, como participando en los diferentes actos realizados en torno al 7 de octubre en sus localidades, así como organizado sus propios actos en defensa del Trabajo decente y dando visibilidad al manifiesto a través de comunicados, notas de prensa, etc

El fundamento, protagonismo e importancia del trabajo realizado está a nivel local, trabajando desde lo común, desde la sencillez, a través de actos y materiales que nos hagan sentir parte, siempre apostando y reforzando ese trabajo común, transversal y horizontal desde lo que nos une, para construir desde ahí. Y siempre con la intención de avanzar y mejorar, sin quedarnos solo en la visibilidad de los actos, manteniendo nuestra vocación como iglesia de salir al mundo ante una realidad que nos duele. Y en todo momento siendo conscientes de la necesidad de coherencia hacia el interior de nuestras organizaciones.

Contra la indecente precariedad:

Este año, clave para el mundo del trabajo, con la celebración del centenario de la OIT y el 25 aniversario de la POTI (Pastoral Obrera de toda la Iglesia), centramos nuestros esfuerzos en la lucha contra la indecente precariedad que afecta a muchas personas trabajadoras. Con un mercado laboral caracterizado por la precariedad, temporalidad y bajos salarios, hoy el 14% de la población ocupada son personas que a pesar de tener un empleo no logran salir de la pobreza, según datos de la OCDE. A lo que se une la constatación, a través de un estudio elaborado en 2017 sobre las condiciones laborales en los sectores de hostelería, agricultura y empleo de hogar, de las personas que participan en los programas de Cáritas, de que se está normalizando la vulneración de derechos laborales en estos sectores, ya de por sí muy precarizados, configurando un mercado laboral que no asegura unas condiciones de vida dignas.

La experiencia de las diferentes actividades desarrolladas durante todos estos años, a lo largo de todo el territorio, nos demuestran la importancia de visibilizar y participar en estos espacios, así como la necesidad de continuar apostando de forma conjunta, para que el derecho al Trabajo Decente forme parte de las agendas políticas, sociales y eclesiales y pueda por fin convertirse en una realidad, a día de hoy todavía muy alejada de la vida de miles de personas.

CAMPAÑA IGLESIA POR EL TRABAJO DECENTE